Simon J Shepherd, Clive B Beggs, Caroline F Smith, Kevin G Kerr, Catherine J Noakes & P Andrew Sleigh.
En los últimos años, se ha renovado el interés por el uso de ionizadores de aire para controlar la propagación de infecciones en los hospitales, y varios investigadores han estudiado la acción biocida de los iones en el aire y el nitrógeno.
Antecedentes
Se ha ignorado en gran medida la acción física de los iones del aire sobre la diseminación y depósito de bacterias. Sin embargo, existe evidencia clínica de que los iones del aire podrían desempeñar un papel importante en la prevención de la transmisión de infecciones por Acinetobacter. Aunque las razones de este hecho no son claras, se plantea la hipótesis de que el responsable podría ser un efecto físico: la producción de iones puede cargar negativamente los elementos de los equipos médicos plásticos para que repelan, en lugar de atraer, las bacterias del aire. Al cargar negativamente tanto las partículas en el aire como los elementos de los equipos plásticos, los ionizadores minimizan la deposición electrostática de estos elementos, y al hacerlo, pueden ayudar a interrumpir la transmisión de infecciones por Acinetobacter en ciertos entornos de atención médica como las unidades de cuidados intensivos.
Métodos
Se llevó a cabo un estudio en una habitación ventilada mecánicamente bajo condiciones ambiente para medir con precisión los cambios en el potencial superficial mostrados por los elementos de los equipos médicos plásticos en presencia de iones negativos. Los elementos plásticos fueron colgados en hilos de nylon, en espacio libre o en contacto con la superficie de una mesa, para ser expuestos a iones negativos producidos por un ionizador de aire. La acumulación de carga en las muestras se midió utilizando un molino de campo eléctrico, mientras que la concentración de iones en el aire de la habitación se registró a través de un medidor de iones portátil.
Resultados
Los resultados del estudio demostraron que los elementos comunes de los equipos, como los tubos de ventilación, desarrollaron rápidamente una gran carga negativa (es decir, generalmente > -100 V) en presencia de un ionizador de aire negativo. Sin embargo, aunque la mayoría de los equipos probados se comportaron de manera similar, un elemento, la caja de un sistema de monitoreo y recolección urológica (el único elemento hecho de acrilonitrilo de estireno), desarrolló una carga positiva en presencia del ionizador.
Conclusión
Los hallazgos del estudio sugieren que la acción de los ionizadores negativos de aire altera significativamente el escenario electrostático del entorno clínico, y que además tienen el potencial para hacer que cualquier partícula del Acinetobacter presente en el aire sea fuertemente repelida por algunas superficies plásticas y atraída hacia otras. De este modo, se puede evitar que elementos primordiales de estos equipos sean contaminados con dicha bacteria.
Artículo original:
Shepherd, S. et al. (2010). Effect of negative air ions on the potential for bacterial contamination of plastic medical equipment [Resumen]. BMC Infectious Diseases. Recuperado de: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/20384999